Es una guía que ayuda a simplificar la elaboración del análisis, asegurando que no se pase por alto ninguno de los factores que deban considerarse. La guía puede usarse para hacer un análisis mental o escrito, siendo este último más cuidadoso y completo.
- El uso de la guía de análisis: La forma de análisis funciona como una guía para la realización sistematizada del análisis, pues dirige a la persona encargada a través de todos los factores que debe considerar y le ayuda a llegar a las sugerencias de mejora. Las descripciones deben anotarse de manera clara y concisa en la forma.
- El objetivo de una operación: El analista debe estar alerta ante la posibilidad de que el trabajo que se está realizando tal vez ya no sea necesario, debido a los cambios en el diseño o las especificaciones de los materiales. En algunos casos, el proveedor de material puede realizar la operación de una forma más económica o ésta puede eliminarse realizando mejor la operación precedente o la subsecuente.
- Diseño de la pieza: El analista debe tomar en cuenta el diseño antes de seguir con otros puntos del análisis, y asegurarse de que el diseño sea correcto y deseable. Se deben eliminar las características de diseño superfluas, con el consiguiente ahorro. El analista debe entender las funciones esenciales de las piezas y de los ensamblajes estudiados.
- Análisis de proceso: Ninguna operación puede estudiarse por sí misma, sino que se debe tomar como parte de un proceso completo. El efecto de cualquier cambio sugerido debe analizarse a la luz de tal proceso. El analista debe mantenerse al día en las novedades de su área de estudio, y recomendar cambios que mejoren la calidad y reduzcan los costos al mejorar o eliminar las operaciones anticuadas o superfluas.
- Requerimientos de inspección: Los requerimientos de calidad, establecidos por el diseñador o el creador de un proceso, juegan un papel importante en la selección de las operaciones y los métodos que se van a usar. El analista debe determinar si los requerimientos de calidad concuerdan con el uso al que se destina el trabajo terminado, y si la operación que estudia producirá resultados acordes con los requerimientos económicos.
- Herramientas y equipo: El analista debe considerar las herramientas y el equipo que se utilizan en la operación, y asegurarse de que sean los más adecuados y económicos para el trabajo que se está realizando.
- Materiales: El analista debe considerar los materiales que se utilizan en la operación, y asegurarse de que sean los más adecuados y económicos para el trabajo que se está realizando.
- Diseño del puesto de trabajo: El analista debe considerar el diseño del puesto de trabajo, y asegurarse de que sea el más adecuado y económico para el trabajo que se está realizando.
- Economía de movimientos: El analista debe considerar la economía de movimientos, y asegurarse de que se estén realizando los movimientos más económicos y eficientes para el trabajo que se está realizando.