Frederick W. Taylor es conocido como el padre de la administración científica. Sus contribuciones a la administración científica incluyen el estudio de tiempos, la supervisión funcional, la estandarización, el concepto de tarea, la tarifa diferencial y otros. Taylor propuso que la eficiencia de producción en una fábrica podría mejorarse enormemente mediante la observación cercana de los trabajadores individuales y la eliminación del tiempo y el movimiento desperdiciados en su operación.
El trabajo de Taylor (Principles of Scientific Management. Harper & Brothers), fue recibido con escepticismo o rechazo por parte de algunos ingenieros, trabajadores y directores de fábrica, que lo consideraban un sistema de trabajo a destajo o una forma de explotación laboral. Sin embargo, su sistema de gestión industrial, conocido como Taylorismo, influyó enormemente en el desarrollo de la ingeniería industrial y la gestión de la producción en todo el mundo.
El desarrollo de la administración científica de Taylor se sitúa en el marco de la industrialización, la inflación y la competencia económica de finales del siglo XIX y principios del XX en Estados Unidos.
Aunque el trabajo de Taylor ha sido criticado por algunos por su enfoque en la eficiencia y la estandarización, su legado sigue siendo relevante en la actualidad. La aplicación de sus principios ha llevado a mejoras significativas en la productividad, la calidad y la seguridad en muchos campos industriales.
Además de Taylor, Frank y Lillian Gilbreth (Motion Study: A Method for Increasing the Efficiency of the Workman. D. Van Nostrand Company), también hicieron importantes contribuciones al estudio de tiempos y movimientos, la ergonomía, la psicología industrial y la administración de la construcción. Su trabajo ha sido reconocido como una importante contribución al desarrollo de la administración científica y la gestión de la calidad.
Análisis de Movimientos en el Trabajo: El Método Gilbreth
El estudio de movimientos es una técnica utilizada para aumentar la eficiencia en el trabajo al eliminar movimientos innecesarios y optimizar los necesarios. Los pioneros de esta técnica a principios del siglo XX fueron Frank Bunker Gilbreth (1868-1924) y su esposa Lillian Moller Gilbreth (1878-1972).
Elementos Básicos: Los Therblings
A través de la observación de numerosos oficios, los Gilbreth identificaron 17 movimientos elementales comunes en la realización de cualquier tarea laboral, a los que denominaron “therblings” (del inglés “to therb” – trabajar).
Estos therblings constituyen los elementos fundamentales en el estudio de movimientos. Incluyen: alcanzar, mover, sujetar, soltar, inspeccionar, ensamblar, usar, etc. Los therblings se pueden clasificar en tres categorías:
- Físicos: son los relacionados con el esfuerzo muscular, e incluyen alcanzar, mover, sujetar y soltar.
- Mentales: implican un esfuerzo intelectual, entre ellos están buscar, seleccionar, planear e inspeccionar.
- Retrasos: son pausas que interrumpen el trabajo, pueden ser inevitables, evitables o por fatiga.
El objetivo del estudio es eliminar aquellos therblings que resulten ineficientes, es decir que no agregan valor al proceso, y reducir la duración de los que sean inevitables a través de la estandarización de métodos.
Principios Fundamentales
El enfoque de estudio de movimientos desarrollado por los Gilbreth se basa en varios principios fundamentales:
- Eliminación de movimientos inútiles: todo movimiento que se demuestre que no agrega valor debe eliminarse.
- Combinación de elementos: cuando sea posible, dos o más operaciones deben combinarse en una sola.
- Reordenamiento de secuencias: buscar la mejor secuencia en la realización de therblings.
- Simplificación de patrones de movimiento: reducir la complejidad de los movimientos necesarios.
- Medición y estandarización: tomar tiempos y métodos para después fijar el método más eficiente.
La aplicación sistemática de estos principios conduce a una reducción de la fatiga y un aumento de la producción. Los Gilbreth también establecieron varias reglas prácticas sobre colocación de materiales, herramientas, iluminación, uso de gravedad, entre otros, que facilitan la labor.
Herramientas para el Estudio de Movimientos
Entre las herramientas desarrolladas y utilizadas por Frank y Lillian Gilbreth para llevar a cabo el estudio de movimientos se encuentran:
- Diagrama bimanual: representa gráficamente todos los movimientos realizados por ambas manos en un proceso de trabajo. Permite visualizar, analizar y equilibrar la labor de cada una.
- Diagrama de proceso de operaciones: muestra la secuencia cronológica de todas las operaciones que componen un proceso productivo. Sirve para identificar y eliminar duplicidades.
- Diagrama de recorrido o de hilos: indica el trayecto seguido por los materiales y los desplazamientos del trabajador. Se usa para balancear distancias y movimientos.
Estas herramientas resultan muy útiles para representar métodos, analizarlos y plantear mejoras orientadas a la eficiencia. También contribuyeron al desarrollo de los diagramas de procesos que hoy son ampliamente utilizados en gestión de operaciones.
Ejemplo de Aplicación Práctica
A modo de ejemplo, se puede mencionar un estudio realizado por Frank Gilbreth en la construcción de ladrillos. Observó que el trabajador se agachaba para recoger los ladrillos de una pila que estaba en el suelo, luego se incorporaba y los colocaba en un andamio a la altura de su pecho.
Siguiendo los principios ya mencionados procedió a:
- Eliminar therblings inútiles: eliminó la necesidad de agacharse colocando la pila de ladrillos en una plataforma a la altura del pecho.
- Combinar operaciones: entregar y recoger el mortero se combinó con colocar cada ladrillo.
- Reordenar secuencias: la secuencia de colocación se optimizó planificando los movimientos previamente.
- Simplificar patrones de movimiento: se fijó una posición estática de trabajo que evitaba giros y desplazamientos ineficientes.
- Estandarizar: se definieron una serie de movimientos básicos y se fijaron tiempos estándar para la realización de cada tarea.
Como resultado de estos cambios aparentemente simples, pero basados en un minucioso estudio, la productividad del albañil se duplicó, reduciendo a menos de la mitad el tiempo requerido por ladrillo colocado.
Aportes a la Ingeniería Industrial
El enfoque scientific management de Taylor había sentado las bases de la medición del trabajo y el uso sistemático del cronómetro para el establecimiento de tiempos estándar. Los Gilbreth retomaron esta conceptualización e incorporaron el estudio de movimientos como complemento ideal.
La visión integral para estudiar y mejorar procesos de producción industrial que aportaron se mantiene plenamente vigente y constituye parte fundamental de la ingeniería industrial actual. Entre los principales aportes se pueden mencionar:
- Enfoque en la reducción de la fatiga y los accidentes a través de mejoras en métodos y condiciones de trabajo.
- Énfasis en el bienestar del trabajador como factor clave en la eficiencia.
- Incorporación de la planificación previa para mejorar resultado final.
- Uso de representaciones gráficas para visualizar y analizar procesos.
- Medición sistemática de tiempos y movimientos para fijar estándares.
Muchas de las herramientas gerenciales y conceptos sobre gestión de operaciones y productividad que hoy damos por sentado tienen su origen en los estudios de Frank y Lillian Gilbreth en las primeras décadas del siglo pasado.